El tratamiento magnético: una tecnología limpia
Guillermo Ribeaux Kindelán
Máster en Ciencias.
Centro Nacional de Electromagnetismo Aplicado (CNEA).
Ave. Las Américas s/n. CP: 90400.
Universidad de Oriente, Santiago de Cuba.
Tel.: (53 22) 643721 y 646380 fax: (53 22) 646376.
e-mail: guillermo@imre.oc.uh.cu,
g_ribeaux_1999@yahoo.com |
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Resultados de la aplicación del tratamiento magnético
en un central azucarero y el impacto del efecto positivo al medio ambiente.
El hombre en su actividad cotidiana vive e interactúa de forma continua con el medio ambiente. Es objetivo común desarrollar la sociedad, sobre todo industrialmente, aspecto este que ha generado grandes contradicciones, pues para el desarrollo industrial y pleno de una nación es necesario la construcción de industrias, que en su mayoría realizan procesos en los que inevitablemente se desechan productos que son vertidos en ríos, mares, lagos y lagunas, provocando su contaminación total o parcial.
Cuba no está exenta de estas indeseadas circunstancias. Son muchos los procesos
y operaciones industriales que culminan vertiendo desechos; entre ellos, y uno de los más propagados en nuestro país, es el vertimiento de residuos de productos químicos empleados en la limpieza de las superficies de intercambio de calor de calderas, evaporadores, calentadores y muchos otros sistemas propensos a generar incrustaciones.
Estas incrustaciones son las deposiciones de las sales de calcio y magnesio presentes en el agua que, al sobresaturarse por el aumento de la temperatura del fluido, se depositan en las paredes y tuberías de los sistemas antes mencionados, llegando a dejarlos en ocasiones fuerade servicio o inservibles por la obstrucción de sus conductos; de ahí que esta limpieza haya que realizarla periódicamente, en dependencia del ritmo del proceso
y la calidad del agua.
La comunidad científica internacional ha ido buscando soluciones con el objetivo
de sustituir esta limpieza química por otros tratamientos físicos al agua que impidan
o disminuyan la formación de las incrustaciones, y por tanto la frecuencia de realización de dicha limpieza.
De estos tratamientos, uno de los más empleados y con gran aceptación en nuestro país es el tratamiento magnético (TM), que consiste en hacer pasar el fluido a través de un campo magnético antes de someterlo al proceso de calentamiento o evaporación; este tratamiento se logra con un dispositivo llamado magnetizador.
El tratamiento magnético constituye una tecnología limpia y de rápida amortización, así como de fácil y sencilla aplicación sin consumo adicional de energía.
Sistema de evaporación de un central azucarero
Para realizar la evaluación del efecto del campo magnético en sistemas donde se transfiere calor, específicamente sistemas de evaporación, se hace necesario usar
una metodología que permita confirmar que la aplicación del campo magnético está cumpliendo su objetivo. El diseño de las alternativas y el tratamiento de los datos experimentales constituyen pasos decisivos para la obtención de resultados
satisfactorios (tabla 1).
Tabla 1 Metodología para la evaluación del sistema de evaporación
Etapas |
1ra. |
Caracterización matemática del sistema de evaporación. |
2da. |
Identificar los parametros de calidad, así como las variables de posible influencia. |
3ra. |
Planificar las experiencias según sean las condiciones
de operación y normas establecidas en el área. |
4ta. |
Procesamiento de los datos experimentales.
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5ta. |
Análisis de los resultados y posible explicación física. |
La metodología seleccionada consta de cinco etapas fundamentales, las cuales
pueden observarse en el diagrama de la figura 1. Es usada en la evaluación del sistema
de evaporación de un Central Azucarero Agroindustrial (CAI), donde se instaló
un magnetizador de la marca MIPAZ, diseñado por el CNEA.
Características de la instalación
El sistema de evaporación del CAI analizado está formado por dos preevaporadores y un cuádruple, con una superficie calórica total de 4 394,17 m2; la capacidad potencial de molida de la fábrica es de 240 000 @ diarias.
Los datos se recopilaron en dos períodos de trabajo en una zafra: uno operando sin el magnetizador y otro con éste ubicado a la entrada del tercer vaso del cuádruple, como
se muestra en la figura 1.

Fig. 1. Esquema del sistema de evaporación del CAI analizado.
Las mediciones se efectuaron a la entrada y salida de los vasos que componen el sistema, incluyendo el preevaporador y el vapor cell, y se recopilaron los datos siguientes: cantidad de caña procesada (@/d), tiempo perdido (h), días entre limpiezas del cuádruple, brix del jugo a la entrada y salida de cada vaso, temperatura del jugo a la entrada y salida de cada vaso (0C), presión de vapor en cuerpo y calandria de cada vaso (kg/cm2), porcentaje de materia extraña en la caña (cuyo valor promedio diario fue de 4 %), y se tomó y se caracterizó una muestra de incrustación típica de los vasos del sistema de evaporación.
Con estos datos se calculan por período y se promedian en cada vaso los índices siguientes: flujo del jugo, porcentaje de evaporación, toneladas por hora de agua que se evapora, razón de evaporación, flujo de vapor y coeficiente de transferencia de calor.Los cálculos se realizaron por el método tradicional que nos ofrece la literatura para el balance de masa y energía de un sistema de evaporación; para la realización de dichos cálculos
y el análisis de los resultados nos auxiliamos del programa de cálculo Excel. Análisis y discusión de los resultados
Al realizar el análisis comparativo entre los períodos puede observarse, en primer lugar, cómo el período donde se aplica la tecnología del tratamiento magnético tiene una duración de dieciocho días de trabajo, a diferencia del período donde no se aplica el tratamiento magnético al jugo, que solo duró doce días; en la figura 2 se representa esquemáticamente esta diferencia.

Fig.2. Duración del trabajo del sistema de evaporación en los períodos analizados.
Se conoce que el parámetro de calidad que determina la presencia o no de incrustaciones en el sistema de evaporación, es el brix de salida del jugo (meladura) en el último vaso del múltiple efecto; en las figuras 3 y 4 se puede observar dicho comportamiento; véase cómo en los períodos analizados este desciende a un valor aproximado de 600 brix, sólo que en el período donde no se aplica el tratamiento magnético lo hace a los doce días; y en el que se aplica, a los dieciocho días.

Fig. 3. Comportamiento del brix de la meladura en el
período donde no se aplica el tratamiento magnético.
Fig. 4. Comportamiento del brix de la meladura
en el período donde se aplica el tratamiento magnético.
El análisis de las figuras de la 5 a la 8 demuestra el indudable ahorro energético en forma de vapor que se deriva del uso de la tecnología del tratamiento magnético por el hecho
de disminuir y eliminar las incrustaciones depositadas en las superficies de intercambio calórico, conociéndose además que un milímetro de incrustación provoca el aumento de hasta 10 % del consumo de energía.

Fig.5. Vapor suministrado con relación a la cantidad de
jugo alimentado en el período, sin tratamiento magnético.

Fig. 6. Vapor suministrado con relación a la cantidad de jugo
alimentado en el período, con tratamiento magnético.

Fig. 7. Curva de tendencia del comportamiento del coeficiente
de transferenciade calor en el período, sin tratamiento magnético.

Fig. 8. Curva de tendencia del comportamiento del coeficiente de transferencia
de calor en el período, con tratamiento magnético.
En la tabla 2 se muestra la cantidad total en gramos por toneladas de caña molida, de productos químicos; en este caso ácido clorhídrico y sosa cáustica son empleados en la limpieza de los evaporadores; véase como hay ahorro de hasta aproximadamente 50 % de dichos productos cuando se emplea el tratamiento magnético, hecho de gran importancia por el impacto económico y sobre todo ambiental que representa.
Tabla 2. Productos químicos empleados en la limpieza de evaporadores
Período sin TM |
Período con TM |
Sosa cáustica 421 |
Sosa cáustica 240 |
Ácido clorhídrico 706 |
Ácido clorhídrico 507 |
En el período sin tratamiento magnético el coeficiente total de transferencia de calor disminuye por el incremento del espesor de las incrustaciones, consume más vapor
y disminuye el tiempo de operación; por tanto, aumenta el número de limpieza química.
En el período con tratamiento magnético se incrementa el coeficiente total de transferencia de calor, por lo que se necesita menor consumo de vapor.
En este experimento concreto el aporte económico ascendió a más de 46 000 dólares por concepto de costo de días de zafra, al disminuir el tiempo perdido y aumentar el ahorro de productos químicos, aspecto de gran importancia por el impacto ambiental que ello provoca. |