El Centro Educacional Volodia

Por
Juan Fundora Lliteras*

Centro con experiencias
en la educación ambiental
y energética.

 

 

En el Centro Educacional Volodia concurren varios tipos de enseñanza, desde el círculo infantil hasta la enseñanza de adultos, y lo distingue un internado para niños sin amparo filial. Desde el 2000 se desarrolla un proyecto en colaboración con la ONG alemana Karen que posibilitó la reparación del Centro, su remozamiento total y la inclusión en él de diferentes tecnologías para el aprovechamiento de las fuentes renovables de energía, para el calentamiento de agua, el abasto de agua al sistema agropecuario de la escuela y un la-
boratorio docente para la enseñanza de las fuentes renovables de energía.

Desde entonces, y con el auspicio de diferentes instituciones, entre ellas CUBASOLAR y el Instituto Superior Pedagógico Enrique José Varona (ISPEJV), se realizan numerosas acciones para organizar y desarrollar la educación energética en el Centro, aprovechando las instalaciones creadas después de su remozamiento.

Desde el curso 2003-2004 se lleva a cabo un proyecto de investigación territorial sobre educación energética, a fin de determinar el modelo teórico-metodológico de la Educación Energética en la Enseñanza General (Primaria y Secundaria). Este proyecto se enmarca en la actividad de Educación Ambiental del Grupo GEA, del ISPEJV, y como continuidad de las acciones que por CUBASOLAR se iniciaron en este Centro.

La investigación y el ahorro de electricidad
En el Centro Educacional Volodia se ha desarrollado un activismo pioneril en el ahorro de electricidad, y dentro de él se ha proyectado, por un grupo de estudiantes, una investigación que propicia el conocimiento de las causas, así como las cuantías del derroche de energía eléctrica que se produce, al tiempo que por esta vía los alumnos hacen ciencia.

El trabajo realizado consiste en estudiar los niveles de consumo de energía eléctrica que corresponden en condiciones normales, y establecer las comparaciones debidas con los gastos reales que diariamente se controlan y divulgan en la escuela. Para este estudio se movilizó una gran cantidad de estudiantes de todos los grados, así como profesores y personal de aseguramiento. Esta tarea la encabezaron estudiantes del noveno grado de la escuela, los que reciben entre sus materias de estudio temas sobre electricidad y circuitos eléctricos. Así, el diagnóstico que se presenta es susceptible de mejoramiento, toda vez que el tiempo de trabajo de los equipos eléctricos aparece en cantidades promedio
(Tabla 1).

Tabla 1. Consumo pronóstico de los equipos de la escuela

Este diagnóstico, a los efectos de la investigación que se realiza, viene siendo una hipótesis. Es la predicción de lo que se debe gastar; y cuanto mejor se haga, mejor podrá determinarse cuánta energía se derrocha o se ahorra en el Centro. La predicción es la teoría, resultado de un estudio, de una investigación en la que se aplican determinados métodos de cálculo y medición de diferentes variables. La medición del gasto diario es la realidad. Comparar la teoría con la realidad constituye la manera de evaluar en qué medida la ciencia reproduce adecuadamente el mundo real que trata de explicar. En esto consiste el hacer ciencia por los estudiantes, aplicando los instrumentos que para tal comparación la ciencia utiliza (Fig. 1).


Fig. 1. Pizarra de control diario de los gastos de electricidad.

Los equipos eléctricos relacionados, de acuerdo con su potencia y tiempo promedio de uso, tienen un gasto de energía aproximado, que podemos redondear en 170 kWh por día. Aquí, para el cálculo del gasto de energía, por tipos de equipos, el estudiante aplica los conocimientos aprendidos y, sobre todo, comprende las limitaciones de las predicciones que hace, valorando así el grado de aproximación que se logra con los conocimientos científicos.

Para comprender cuánto se derrocha o se ahorra, se recogen varios datos que revelan la diferencia entre el gasto diario y el valor pronóstico de lo que se debe consumir diariamente.

Este estudio ha permitido influir sobre los puntos vulnerables en la escuela:

• En la ludoteca no se apagaba la luz.
• Existen locales donde el control o interruptor está deficitario y la luz no se apaga.
• Hay luminarias que estaban encendidas más del tiempo necesario, sobre todo las exteriores.
• Los medios audiovisuales que se emplean en el proceso docente-educativo no se apagaban con la regularidad requerida.

El experimento escolar
Actualmente se desarrolla, en el marco del proyecto, un experimento pedagógico donde se valida la inclusión, en el currículo escolar de Secundaria Básica, de la actividad experimental para el trabajo con fuentes renovables de energía.

El proyecto consiste en un sistema de trabajo práctico en el tratamiento del tema de corriente y circuitos eléctricos con paneles fotovoltaicos como fuente de energía. Lo novedoso del sistema es el trabajo experimental en la solución de problemas, tal y como se trabaja en la ciencia, en contraposición con la actividad tradicional de experimentos docentes tipo «recetas de cocinas» (Fig. 2).

La experiencia refleja el alto interés de los estudiantes por el nivel de aprendizaje que alcanzan, al tiempo que se relacionan con los paneles solares, cuya instalación y orientación aprenden como parte del trabajo docente que realizan.

El sistema incluye el diseño de los circuitos que se plantean, y la identificación de los problemas que hay que resolver, primero en la computadora, para después concretarlos en objetos reales del conjunto experimental creado. Este último es un equipamiento de bajo costo, y que ya se analiza para incluirlo como experimento en las secundarias básicas de la Ciudad Escolar Libertad, bajo la dirección de la Cátedra de Educación Energética del ISPEJV.

Se ha incluido una forma de superación del personal docente que comprende dos cursos de postgrado a profesores, responsables del PAEME, en las secundarias básicas del municipio. La preparación metodológica, las reuniones del colectivo de investigación, la participación en las actividades del experimento docente que se desarrolla y las conferencias impartidas en el marco del Diplomado de Educación Ambiental del Grupo GEA, se han llevado a cabo de forma sistemática, a fin de su integración definitiva al trabajo de la escuela.

Los resultados del proyecto se han presentado hasta el momento en tres eventos internacionales (dos en Cuba y uno en España) y en varios nacionales, en los que han resultado destacadas la actividad experimental que se realiza con paneles fotovoltaicos en el montaje de circuitos, así como el estudio de los temas de corriente eléctrica.
La experiencia de la Educación Energética en el Centro Educacional Volodia contribuirá a establecer el marco teórico-metodológico de esta actividad en el Sistema Nacional de Educación.

* Profesor de la Cátedra de Educación Energética del Grupo GEA, del Instituto Superior Pedagógico Enrique José Varona (ISPEJV).