La tarifa regulada
o de precios fijos
Por
Conrado Moreno Figueredo*
Análisis de los mecanismos de apoyo a las fuentes renovables
de energía, en particular el feed-in-tariff (en Inglés).
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Los principales modelos de mecanismos de apoyo o ayuda a las fuentes renovables de energía que se usan en el mundo hoy en día, constituyen una alternativa para acelerar la introducción de las tecnologías de las fuentes renovables en la matriz energética en muchos países del mundo, para poder aprovechar mejor las experiencias en esta temática.
Después de muchos años de empleo de estos mecanismos, se ha llegado a la conclusión que no existe un mecanismo ideal que se adapte a todos los países. Estos esquemas de apoyo dependerán fundamentalmente del grado de desarrollo económico del país en cuestión, y de sus características. Una fusión o mezcla de los existentes, adaptados a la economía y procedimientos financieros de cada país, pudiera conllevar al éxito. Cuba, en vías de desarrollo y con un modelo de economía socialista, necesita de un mecanismo de apoyo propio que acelere la introducción y uso de las fuentes renovables de energía, de cara a un desarrollo energético sostenible.
La aceleración de la transición de un sistema basado en los combustibles fósiles, a otro basado en las fuentes renovables de energía, es de vital importancia para la humanidad, por varias razones. Sin embargo, ¿por qué esa transición está ocurriendo tan lentamente?
Barreras para las fuentes renovables
Son varios los marcos jurídicos y las barreras actuales que hay que superar para desbloquear el enorme potencial de las fuentes renovables de energía, y convertirlas en un importante factor en el suministro global de energía.
Las fuentes renovables continúan en desventaja por las distorsiones de los mercados eléctricos, creados durante décadas, de apoyo masivo a las tecnologías convencionales desde el punto de vista financiero, político y estructural. Para el desarrollo de las fuentes renovables de energía se necesitan grandes esfuerzos políticos y económicos, fundamentalmente con leyes que garanticen tarifas estables durante un largo período.
La eliminación de esas distorsiones pasa por eliminar la ausencia de estructuras para determinar los precios en los mercados energéticos, que reflejen los costos totales para la sociedad y estén implícitos en la producción de energía. En ese sentido, las fuentes renovables tienen una desventaja competitiva con respecto a las tecnologías convencionales debido al empleo de subsidios estatales y de compañías eléctricas y(o) a través de tarifas eléctricas.
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Sala de máquinas de una minihidroeléctrica cubana. |
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El costo real de la producción de energía a partir de combustibles convencionales debe incluir los gastos que son absorbidos por la sociedad, así como los impactos sobre la salud y la degradación del medio ambiente, tanto a nivel local como regional, además de los impactos negativos a nivel mundial en el cambio climático. Un ejemplo que evidencia esta afirmación son los costos no declarados por la exoneración de los costos de seguros por accidentes nucleares, que son demasiado costosos para ser cubiertos por los operadores de las centrales nucleares. Idealmente, la producción de energía no debería contaminar, y debería ser responsabilidad de los productores de energía evitar la contaminación. Si contaminan, deberían pagar una cantidad igual al daño provocado a la sociedad en su conjunto, aunque puede resultar difícil cuantificar los impactos ambientales que provoca la generación de electricidad. ¿Qué precio tienen la pérdida de tierras costeras y los hogares de sus habitantes en islas, por efecto del incremento de la altura del nivel del mar, o el deterioro de la salud y la pérdida de vidas humanas? Estimados llevados a cabo en Europa expresan que los costos de producción de electricidad a partir del carbón o el petróleo se duplicarán, y el gas podría aumentar en 30%, si tuvieran en cuenta los costos externos en términos de daños a la salud y al medio ambiente.
Si a la vez se eliminaran los subsidios directos o indirectos a los combustibles fósiles y a la energía nuclear, disminuiría notablemente la necesidad de aportar ayudas a la generación de electricidad mediante fuentes renovables de energía, o pudieran ser innecesarias.
Introducir el principio de que «quien contamina paga» por parte de los gobiernos, es decir, incluir los costos externos o externalidades en la factura del precio de la energía, resulta fundamental para acelerar el proceso de introducción del empleo de las tecnologías energéticas sostenibles. Los gobiernos deben cobrar a los emisores de acuerdo a su nivel de contaminación, o aplicar compensaciones adecuadas para quienes no producen emisiones.
En muchos países existen dificultades y obstáculos burocráticos para los proyectos con fuentes renovables de energía para la producción de electricidad. Se necesitan leyes que den acceso prioritario a los proyectos de generación de electricidad con fuentes renovables de energía, ya que los beneficios ambientales de dichas fuentes son bienes que favorecen a toda la sociedad.
A las barreras anteriores se agrega que las grandes compañías se oponen a la aparición de otros inversionistas, y que los gobiernos prefieren las soluciones grandes y centralizadas. La falta de experiencia en la administración de las plantas generadoras con fuentes renovables de energía, y la incertidumbre y el riesgo de la inversión, constituyen también frenos para la rápida introducción de estas tecnologías renovables. Estos y otros factores hacen difícil el acceso al mercado de las fuentes renovables.
Barreras para la energía eólica
En lo que respecta a la energía eólica, tres de las barreras son los altos costos de inversión inicial y durante la construcción, los costos de interconexión a la red, y la falta de experiencia para operar con parques eólicos en los países emergentes. Otros elementos que influyen negativamente en la introducción de las plantas eólicas, es la lentitud en los procesos de otorgamiento de licencias, la falta de conocimiento en el manejo adecuado de los impactos ambientales, y la dificultad de pronosticar la cantidad de electricidad que la instalación va a entregar a corto plazo.
Barreras adicionales en los países en desarrollo
En los países en desarrollo, las largas distancias a las zonas remotas, las deficientes vías de acceso a estos sitios y la insuficiente infraestructura de comunicación, son barreras que se suman a las antes mencionadas. En esos países, la situación se agrava por la falta de personal calificado para llevar a efecto todo el proceso de aplicación de esas tecnologías.
Como conclusión, las desventajas a las que se enfrentan las fuentes renovables de energía necesitan ser eliminadas, superando las barreras existentes, lo que resulta, en la práctica, muy complejo. La eliminación de las distorsiones del mercado en el sector eléctrico necesita de políticas que a corto plazo no resultan viables. Aplicar el principio de que «el que contamina paga» no es una solución actual. Por ello, aplicar mecanismos de apoyo y ayuda a las fuentes renovables de energía es una de las soluciones actuales para corregir dichas distorsiones.
Mecanismos de apoyo más aplicados
Estos mecanismos, en definitiva, son incentivos para promover el desarrollo de las fuentes renovables de energía. Los más aplicados han sido:
• La tarifa regulada o sistema de precios fijos (feed-in -tariff, en Inglés).
• El sistema de cuotas renovables.
• La licitación.
En el modelo de la tarifa regulada, el gobierno regula el precio de venta de la electricidad (o prima), que debe pagar el productor, y deja al mercado que determine la cuota de contribución de las fuentes renovables de energía a la matriz energética. En el sistema de cuotas renovables, el gobierno regula la cantidad de electricidad que debe provenir de fuentes renovables de energía, y deja que el mercado determine el precio. Ambos sistemas crean un mercado que protege a los productores de energía mediante fuentes renovables de energía frente a los generadores con fuentes convencionales, subsidiados y con costos ambientales que no son tenidos en cuenta.
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Aprovechamiento de la energía solar
para la generación de electricidad.
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La tarifa regulada o sistema de precios fijos
Este sistema se aplica fundamentalmente en Europa, aunque su inicio data de 1978 en los Estados Unidos. Se aplica en 41 países (hasta el 2006), y en varios estados y provincias de la India y Canadá. Actualmente se estudia su introducción en África, Asia, América Latina y Australia. Ha probado ser un sistema exitoso por sus resultados en la expansión de la energía eólica en Alemania, España y Dinamarca. Los productores reciben un precio fijo por cada kWh generado y entregado a la red.
Es, en sí misma, una definición de una política energética que se puede aplicar a todas las fuentes renovables de energía. Es un mecanismo que se basa en la fijación del precio de la energía generada, y termina en una ley que fija el precio y establece el pago a los productores de energía mediante fuentes renovables de energía. Usualmente es un precio diferenciado acorde con la tecnología y tamaño de la instalación. Ha sido la más exitosa (hasta ahora) de las políticas aplicadas: dos tercios de la capacidad eólica instalada en el mundo se han gestionado bajo este principio, además de la mitad de la capacidad solar fotovoltaica instalada en el planeta.
El tiempo para el cual el precio es acordado debe también ser establecido en la ley, y debe cubrir un espacio significativo dentro del tiempo de vida útil de la instalación. En los mejores diseños, los tiempos son largos para dar certeza al inversor; generalmente oscilan entre 15 y 25 años, y en algunos casos no tienen límite. El operador de la red está obligado a dar prioridad a las instalaciones de fuentes renovables de energía.
La tarifa se diseña acorde a un estimado del costo de la electricidad generada por cada tecnología renovable, más la asignación de un beneficio razonable. El valor debe ser cercano al costo del combustible evitado o desplazado por la instalación. Influyen en la fijación de la tarifa la generación esperada y el tiempo de vida útil de la instalación. Generalmente este trabajo de diseño de la tarifa se realiza conjuntamente con especialistas y consultores experimentados, y finalmente el precio lo fijan las instituciones gubernamentales correspondientes (Tabla 1 y Fig. 1).
Tabla 1. Tarifas en el 2006 (€/kWh) y duración
Fig. 1. Precios pagados por la energía eólica en Europa y Canadá.
En otros artículos se analizarán otros mecanismos de apoyo que se aplican en el mundo. ¿Cuál de ellos será el mejor para Cuba? Eso deberán definirlo los especialistas y economistas cubanos relacionados con este tema, ya que cualquier mecanismo de apoyo no está desligado del modelo económico del país en cuestión.
* Doctor en Ciencias Técnicas. Profesor Titular del Centro de Estudio de Tecnologías Energéticas Renovables (CETER). Miembro de la Academia de Ciencias de Cuba (ACC) y de la Junta Directiva Nacional de CUBASOLAR.
e-mail: conrado@ceter.cujae.edu.cu
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