La luz del Sol, la fuente natural por ex-celencia, es considerada positiva para los seres vivos, entre ellos el organismo humano.
Las radiaciones infrarrojas, visibles e
incluso las ultravioletas llegan a nosotros y propician muchos efectos positivos aun
cuando el descuido del hombre al interactuar con el medio ambiente ha motivado la
contaminación, el adelgazamiento de la capa de ozono y exceso de estas últimas: las
ultravioletas, aquellas de mayor frecuencia que pueden producir peligrosos efectos. La helioterapia y la talasoterapia, que combina la conjunción con los baños de mar, se utilizan en diversas afecciones dermatológicas. Esta alternativa de salud, con una fuente luminosa natural, es relativamente barata. |
Antecedentes históricos del uso terapéutico de la luz
Es incuestionable la importancia de hurgar en la historia del uso terapéutico de la luz, pero no simplemente para relatar.
Profundizar en los orígenes y los basamentos de cada uno de los enfoques, occidental y tradicional, permite ubicar estas terapéuticas desde la óptica del momento actual y permite, según Kuhn: "descubrir el conjunto de mitos, errores y supersticiones que impidieron una acumulación más rápida de los componentes del caudal científico".
Grecia:
Desde la antigüedad los griegos ya conocían, en el caso de diversas afecciones, las posibilidades de los baños de Sol.
Oriente:
La medicina ayurvédica de la India asocia a cada chakra un color correspondiente para realizar el tratamiento.
En la medicina china los colores de la luz a aplicar se seleccionan según el diagnóstico chino: las causas exógenas de las enfermedades (frío, calor, humedad y sequedad, y sus combinaciones) se asocian a los diferentes colores.
Las formas terapéuticas pueden ser:
aplicación zonal
irradiación en puntos de acupuntura
observar la fuente luminosa
ingerir el agua coloreada
visualizar la luz
Europa occidental:
Pero no fue hasta finales del siglo XIX que se realizaron investigaciones sistemáticas sobre la acción biológica y terapéutica de la luz. Estas investigaciones se iniciaron, a mediados del siglo XIX, en Alemania primeramente con animales y después con hombres.
Los principales resultados fueron:
se comprueba una acción biológica y terapéutica de la luz que no tiene que ver con la visión.
se verifica una influencia de los diferentes "colores" de la radiación luminosa, es decir, una diferente respuesta fisiológica para el desprendimiento de CO2, el desarrollo de animales y el metabolismo de los gases en general se destacan contradicciones entre los resultados de los diferentes autores.
hizo notables aportaciones al estudio de la luz y la percepción del color.
Además, los principios de la fotografía moderna a colores
derivan del experimento hecho por él en 1860.
A principios del siglo XX se obtienen otros resultados manifestándose, al igual, marcadas contradicciones acerca de la efectividad relativa de las radiaciones de diferentes longitudes de onda (o colores). Se comprueban otros efectos como son:
Se incrementa la capacidad de reacción de la corteza del encéfalo.
Se aumentan las reacciones inmunes del organismo.
Se activa el sistema de circulación sanguínea.
Se incrementa la capacidad de los tejidos para la regeneración, la proliferación celular y la actividad de las enzimas de oxidacción-reducción.
Todos estos resultados, aun cuando no se encontraban fundamentados sobre la base de una sólida teoría, hicieron posible la aparición de nuevos métodos de tratamiento y también la aparición de nuevas fuentes artificiales de luz.
También en Alemania, durante la década de los veinte, Finzer utilizaba la Lámpara de Minin (azul), y lámparas incandescentes con filtros o lámparas de descarga de Neón para tratar las afecciones.
Con luz azul y ultravioleta, enfermedades de la época como el lupus, tuberculosis y otras como las alteraciones o dolencias de las articulaciones, verificándose su acción estimulante, que incrementa la producción y efectividad de factores humorales y celulares de la inmunidad, así como se incrementa la resistencia al resfriado.
Con luz roja, otras como viruela, sarampión, erisipela, escarlatina y algunas dermatosis, aquí se reconoce también la acción estimulante, el incremento de la dilatación vascular y la evidente acción antinflamatoria.
En todos estos casos, una vez hecho el diagnóstico, el médico disponía la aplicación de la radiación luminosa a través de la piel, encima de la estructura anatómica supuestamente responsable de la afección.
A pesar del esplendor que gozó a finales del Siglo de las Luces, y a causa del impactante desarrollo de la quimioterapia, a partir de la dé-cada de los treinta la fototerapia fue practicamente olvidada.
Solamente sobrevivió la terapia ultravioleta para algunas afecciones de la piel, y la lámpara infrarroja como una de las variantes de la termoterapia.
Los últimos avances tecnológicos y la fototerapia
Durante los últimos 30 años se desarrolló con ímpetu una tecnología biomédica basada en una fuente especial de luz, el láser.
Este tipo de luz es la base del funcionamiento de un variado, sofisticado y costoso equipamiento electromédico que sustenta una de las terapias más exclusivas del mundo occidental, aún no accesible a las grandes mayorías. Esta alternativa de salud, basada en una fuente artificial y costosa, es relativamente cara.
Entre uno y otro tipo de fuente luminosa han existido otras, algunas como base de equipa-miento terapéutico.
Teniendo en cuenta las diferentes propiedades de la luz como: composición espectral, direccionalidad, intensidad y grado de coherencia se resumen en la tabla, algunos datos interesantes de las diferentes fuentes luminosas que el hombre ha utilizado para diversos fines, destacándose aquellas aplicaciones de carácter terapéutico.
Es curioso comprobar que, tanto en la medicina occidental como la medicina natural y tradicional, el uso de la luz ha tenido y tiene un espacio reconocido cuando de aplicación terapéutica se trate.
FUENTE |
MECANISMO FÍSICO DE BASE |
PROPIEDADES | USOS TERAPÉUTICOS |
Sol | Fisión nuclear | Luz blanca Amplio espectro de frecuencias | Helioterapia Heliotalasoterapia |
Llama | Combustión | Efectos térmicos por conducción, convección y(o) radiación | Moxibustión |
Lámpara de arco eléctrico | Arco eléctrico | Luz blanca alto contenido de infrarrojo | Fototerapia Terapia infrarroja |
Lámpara incandescente | Efecto Joule | Luz blanca con alto contenido de infrarrojo | Fototerapia Terapia infrarroja Cromoterapia |
Lámpara de descarga | Emisión espontánea | Luz con emisión espectral selectiva a diferentes longitudes de onda en dependencia del gas, con relativa intensidad y bajo consumo | Fototerapia Terapia ultravioleta Terapia con luz no-coherente Cromoterapia Cromopuntura |
Diodos de semiconductor electroluminiscentes |
Emisión espontánea | Considerable grado de monocromaticidad. Bajo consumo |
Terapia con luz no-coherente |
Láser | Emisión estimulada | Alta monocromaticidad, alto grado de coherencia. Gran direccionalidad y altas intensidades |
Laserterapia Laserpuntura |