¡Feliz y exitoso 2020!

Dejamos atrás un año turbulento, casi de guerra. Como si fuera una tenebrosa premonición de lo que nos sobrevendría, el 2019 se nos encimó con un desastre inesperado e insólito, aunque de origen natural: un tornado estremeció a La Habana con su terrible secuela de daños de todo tipo. Que se sepa, nunca antes había ocurrido.

Y a raíz de aquello arreció contra nosotros, con toda su fuerza y brutal perversidad, el odio imperial. Durante todo el año los mandantes del imperio fueron multiplicando y recreciendo sus agresiones, cuya extensa relación desbordaría la pretensión de estas líneas; además, nuestro pueblo no las olvida ni las soslaya, y las combate porque esas heridas se mantienen abiertas.

Entre tantas baste mencionar el cerco petrolero que afectó muy duro la situación energética del país, la prohibición de viajes USA-Cuba incluyendo los cruceros y el cierre de casi todos los aeropuertos cubanos para las aerolíneas estadounidenses, golpeando a fondo nuestro turismo. En fin, se recrudeció el criminal bloqueo yanqui, el más brutal y prolongado de la historia. Nuestra Patria, Cuba, se mantiene en el centro de su fobia demencial, de su obsesión de imperio que viene a menos, por doblegarnos y poseernos. Un viejo anhelo desde doscientos años atrás.

Sin embargo, muy por encima de tales agresiones sobresale el hecho cierto, irrefutable, de que una vez más hemos vencido. Todos esos nuevos zarpazos nos hicieron daño, mucho daño, pero la inteligencia y la voluntad mancomunadas de nuestra dirigencia y del pueblo fueron neutralizándolos, y venciéndolos. Contamos con la fuerza siempre viva de los fundadores, y con la lealtad y eficacia de los continuadores. En el frente económico el imperio intentó en 2019 una nueva invasión de Girón en lo económico y se empeñó a fondo en ello, pero al igual que entonces, recibió una nueva derrota. «Hemos salvado obstáculos que parecían insalvables»–expresó Díaz-Canel al realizar el balance del año- «¡Nos tiraron a matar y aquí estamos! »

Y este año de tantas batallas finalizó con una cima que será histórica. Nuestra Asamblea Nacional revisó con lupa crítica lo mucho realizado durante el año que terminaba, trazó el camino para la renovada andadura victoriosa en el 2020, y adoptó audaces y decisivos acuerdos dirigidos a perfeccionar y consolidar la institucionalización del país.

No podemos pasar por alto el hecho de que en el aciago 2019 Cubasolar arribó a sus 25 años de indetenida brega por la conciencia energética y el respeto ambiental, y tuvimos ocasión de celebrarlo. Desde nuestra modesta trinchera, Cubasolar se enorgullece por haber puesto su granito de arena en lo que hemos alcanzado, y en particular por haber seguido siendo un fiel soldado más del pueblo y la Revolución. Nos enorgullece, en fin, pertenecer a nuestro heroico pueblo.

¡Un exitoso y feliz 2020 deseamos a todos los hermanos revolucionarios!