Sociedad Cubana para la Promoción de las Fuentes Renovables de Energía y el Respeto Ambiental

Organización con estatus consultivo especial ante el Consejo Económico y Social de las Naciones Unidas Fundada el 19 de noviembre de 1994

Ser una organización que trabaje por el verdadero desarrollo sostenible, el cual solo podrá garantizarse con un suministro solidario de energía basado en las fuentes renovables que evite el cambio climático y proteja el medio ambiente.

Promover la cultura en el uso de las fuentes renovables de energía con conciencia y respeto ambiental, mediante las experiencias adquiridas, patrimonio y acciones en los ámbitos local, nacional e internacional.

Estructura de cubasolar



El Movimiento de Usuarios del Biogás en Cuba

La historia del Movimiento de Usuarios del Biogás en Cuba (MUB) abarca cuatro períodos o etapas fundamentales: La primera etapa (1984-1994), caracterizada por la sensibilización y la capacitación; la segunda (1994-2004), marcada por la promoción e implementación de la tecnología; la tercera (2004-2014) distinguida por su extensión e integración, y la cuarta etapa (2014-2017) determinada por la organización y certificación.

Los talleres y encuentros de usuarios del biogás a diferentes niveles, han contri- buido al conocimiento y aplicación del biogás en las diversas provincias del país. Las acciones promovidas y que se han socializado por estos intercambios de usuario a usuario, han permitido también la interrelación y colaboración entre los principales actores, contribuyendo de manera decisiva en la necesaria cultura popular en pos del desarrollo progresivo del biogás en Cuba.

En julio de 1984, con la creación del Grupo de Proyectos para el Diseño y Desarrollo de Plantas de Tratamiento de Aguas Residuales y Potabilizadoras, en la Empresa de Investigaciones y Proyectos Hidráulicos de Villa Clara, del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (INRH), comienza un trabajo de sensibilización, capacitación y aplicación del biogás, con técnicos y especialistas del sistema de recursos hidráulicos, así como de profesionales y miembros de la Sociedad de Ingeniería Hidráulica de la Unión Nacional de Arquitectos e Ingenieros de la Construcción de Cuba (Unaicc), que fueron la base del Grupo de Biogás Villa Clara (Proyecto GBV), agrupados voluntariamente.

A partir de 1994, las experiencias adquiridas por dicho Grupo se extendieron a Matanzas y Pinar del Río. La población cubana vivió en esos años un período crítico en sus condiciones de vida; el país atravesaba el llamado «período especial» en el que se agudizó una crisis económica profunda, tras la caída del campo socialista. Se pre- sentaron grandes limitaciones en todos los ámbitos sociales y en particular en la vida doméstica, relacionadas principalmente con la insatisfacción de necesidades existenciales, tales como la producción y cocción de los alimentos. Muchas alternativas surgieron de la innovación popular que propiciaron la solución a diversas carencias materiales y múltiples dificultades. La promoción del conocimiento sobre las fuentes renovables de energía y sus variantes de uso, sintonizaron de manera coherente con las problemáticas existentes y la situación mundial ante el agotamiento de los combustibles fósiles.

En numerosas zonas rurales comienzan a aparecer rústicos fogones y la experimentación de la tecnología del biogás, caracterizada por la diversidad de diseños surgidos del ingenio popular. De esta manera comienzan a desarrollarse en Villa Clara, diversas acciones bajo el liderazgo del Grupo para el tratamiento de aguas residuales y plantas de biogás. Ello contribuyó notablemente a la adquisición de valiosas experiencias en esa provincia, y luego en el resto del país.

En la segunda mitad de la década de los años 90 se vinculan al MUB otros territorios, hasta establecerse en nueve provincias. En el 2009 se celebra el Primer Encuentro Nacional de Usuarios del Biogás, por iniciativa de la provincia promotora, Villa Clara.

Así, la referida agrupación comienza a aglutinarse ante los beneficios energéticos y ambientales que ofrece el biogás, primero bajo el proyecto denominado GBV, hasta convertirse en el actual MUB que ya se generaliza en todo el archipiélago. En 2014 se constituye como grupo de trabajo de Cubasolar, por acuerdo de la Asamblea General de Asociados.

«Sustentamos las condiciones de vida de un sector amplio de la población cubana que instrumenta la tecnología del biogás con acciones participativas y creativas, a partir de características, posibilidades y condiciones específicas. Asesoramos y acompañamos, a los usuarios del biogás, en el adecuado aprovechamiento de los productos finales del tratamiento de los residuos orgánicos a ciclo cerrado, y en la aplicación del saneamiento ambiental en el contexto del desarrollo local».

«Movimiento organizado en territorios, con capacidad de generar acciones locales, relacionados con la tecnología del biogás y de otras fuentes renovables de energía, a partir de sinergias con actores locales, que propicien la formación de expertos y la construcción de sistemas de tratamiento de residuos orgánicos a ciclo cerrados en armonía con el medio ambiente, a través de las propuestas de los usuarios líderes, comprometidos y motivados para aportar ideas y proyectos innovadores, sustentables y dinámicos que contribuyen a mejorar la calidad de vida y el saneamiento ambiental en el contexto del desarrollo local en Cuba».

Dr. José Antonio Guardado Chacón



El Movimiento de Alimentación Sostenible en Cuba

Cubasolar asume como uno de sus objetivos fundamentales coadyuvar a establecer nexos entre los conceptos de agua, alimentación y energía, mediante proyectos de sostenibilidad energética enfocados a la producción de alimentos. Es por ello que en su Junta Directiva Nacional de noviembre de 2018, se aprueba el Movimiento de Alimentación Sostenible (MAS), como forma de viabilizar acciones relacionadas con la obtención de producciones alimentarias eficientes y de calidad, con las menores afectaciones al suelo y al medioambiente general. El MAS es un grupo de trabajo cuyos miembros promueven la integración de los procesos de producción y consumo de alimentos, considerando fundamentos como la agroecología y la permacultura, el uso de las fuentes renovables de energía (FRE) y la elaboración y conservación de alimentos, sobre bases culturales, socioeducativas y de la defensa del medioambiente para la consecución del desarrollo sostenible.
Sin duda, la desaparición del campo socialista condujo a reconsiderar el modelo agrícola cubano en tanto fuente de abasto de alimentos, sesgado además por los cánones de una agricultura altamente convencional. La implementación de programas nutricionales para la seguridad alimentaria, el desarrollo de la agricultura urbana y periurbana y la transición hacia una agricultura sostenible, con predominio de la innovación tecnológica y la sustitución de importaciones, son algunos de los basamentos de esas políticas. Es por ello que desde hace más de veinticinco años este grupo ha desarrollado acciones relacionadas con procesos de soberanía alimentaria y energética, desde diverso campos de actuación e instituciones, en aras de mostrar la rica diversidad alimentaria de nuestro país y las vías para lograr vías eficientes de producción y consumo de alimentos.
Por otra parte, durante esta etapa se han establecido sinergias con los preceptos de Slow Food International, organización con sede en Italia, que se contrapone a las políticas de las transnacionales del alimento y a su acción directa a través del fast food, -conocido como «comida chatarra»-, que provoca la estandarización del gusto con la consiguiente afectación a la salud humana y a la biodiversidad, dado el alto consumo de recursos no renovables. Slow Food promueve la difusión de una nueva filosofía del comer dirigida a la defensa de las tradiciones gastronómicas y agrarias regionales, y de los saberes trasmitidos con sus métodos de cultivo que no dañen el entorno.
El grupo abarca a agricultores, energéticos, cocineros, académicos, educadores, agroecólogos, gestores, gastronómicos, investigadores y usuarios de tecnologías del biogás, que laboran en las áreas asociadas a los temas de agroecología, alimentación, cultura y medioambiente. Sus activistas están nucleados en proyectos dirigidos al rescate de las tradiciones alimentarias, a la promoción de nuevas formas de elaborar los alimentos, a la educación por el respeto a la naturaleza, al fomento de una agricultura sobre bases agroecológicas, a la enseñanza y creación de hábitos alimentarios sanos en las nuevas generaciones, la defensa de la biodiversidad y al desarrollo de acciones para enfrentar el cambio climático.
En esta nueva etapa de trabajo, el MAS se propone seguir visibilizando las acciones cubanas que propugnan por el desarrollo de producciones sostenibles de alimentos, junto al mejoramiento de nuestra cultura agroalimentaria, y posicionar una vez más el nombre de Cuba en el campo internacional.
La creación de este Movimiento en el seno de la Sociedad Cubana para la Promoción de las Fuentes Renovables de Energía y Respeto Ambiental, es una alianza de saberes y un reto necesario para la transferencia de conocimientos, el diálogo complementario y el trabajo conjunto por la defensa del medioambiente y la sostenibilidad de nuestro planeta.

Madelaine Vázquez Gálvez, coordinadora.
Aurelia Castellanos Quintero, vicecoordinadora
Leidy Casimiro Rodríguez, vicecoordinadora

Jóvenes: Amelis Beatón Castellanos
Mercado de la Tierra: Raúl Relova Vento y Misael Ponce Lugo
Alianza de cocineros: Yamilet Magariño Andux
Arca del Gusto: Yaquelín Herrera Valdes
Comunicación: Nélida Pérez Hernández